Soñé con ser rockstar, pero claramente mi talento para la música es incomprendido, mis versiones acústicas en la guitarra de palo son subvaloradas, para que decir mi capacidad vocal cada vez q canto en un karaoke, literalmente hago temblar el escenario. Por suerte tengo mi publico fiel que me sigue, ese que cada vez que entro a la ducha me ovaciona, prende antorchas bajo el agua, me celebra cada estupidez que hago, corean mis eeeooooo!. Son años ya de un fanatismo de locos, hacen fila por horas para ser los primeros en el concierto con horario AM mas exitoso que conozco, no les importa la lluvia, se mojan felices, siempre hay un lleno total, me atrevería decir que casi siempre son los mismos... la llave de agua no es otra cosa que el volumen del amplificador.
Quien crea que la locura podría parar ahí, se equivoca, después del concierto, intento pasar piola, ser uno mas, pero cada mañana, un tumulto de gente, mis fans supongo, cuando llego a mi destino, se arrojan sobre mi y eso que educadamente mi chofer les dice: dejen bajar primero, por suerte de la nada aparece mi staff de seguridad que me rodea y apretados y todo, logramos bajarnos del carro y esquivarlos.
Ser rockstar no es fácil como creen, pero se puede.
